Tag Archives: recuperación hernia discal

Hernia discal – La alternativa a la cirugía

20 Feb
  • ¿Qué es la Hernia Discal?

La hernia discal es una de las dolencias de la columna vertebral más comunes de hoy en día. Se produce cuando una parte de un disco intervertebral se desplaza y comprime la médula espinal o una raíz nerviosa. Esta presión puede producir daños neurológicos (en los nervios) y, por tanto, causar dolor.
El dolor que provoca una hernia puede extenderse desde la espalda hacia la pierna, si la hernia está a nivel lumbar; o el brazo, si está a nivel cervical.
No todas las personas que tienen una hernia de disco sienten dolor u otros síntomas. Si la hernia no comprime la médula o algún nervio, probablemente la persona ni siquiera se entere de que tiene una.

  • ¿Por qué tengo una hernia discal?

Un traumatismo, golpe violento, o esfuerzo mal realizado o controlado pueden ser el detonante para que un disco que se encuentra sano se hernie. También ocurre, desafortunadamente, que traumatismos y sobre-esfuerzos son la causa de que un disco herniado empeore aún más.
Cuando levantamos un peso de una manera incorrecta, arqueando la espalda hacia atrás, aplicamos una presión excesiva en la parte posterior del disco, la más débil. Esta es la razón por la que la mayoría de los daños y las hernias se producen en la parte posterior del disco.
Por lo general las hernias afectan los discos que se encuentran en el zona baja de la espalda (columna lumbar) o en el cuello (columna cervical).

  • Levantar Pesos y la Hernia Discal

El proceso mecánico típico por el que se producen las hernias discales es el siguiente:
1. Flexionamos el tronco hacia delante; la presión en la zona delantera del disco es mayor.
2. Carga un peso de cierta importancia y al hacerlo incrementamos la presión entre vértebras y por tanto sobre los discos.
3. Enderezamos la columna con el peso cargado. Entonces al ejecutar este movimiento la presión se traslada de la zona delantera del disco hacia la trasera, que es más débil. Si la presión que soporta el anillo fibroso es suficientemente fuerte, éste se desgarra (en cuyo caso se produce una fisura discal), se prolapsa o deforma (entonces se produce lo que se llama protusión discal) o directamente se rompe (y se produce una hernia de disco).

  • Causas de Deterioro de un Disco

Las causas principales de que un disco se deteriore son las siguientes:

Degeneración o envejecimiento de la articulación.

Golpes o movimientos violentos que producen microtraumatismos o traumatismos.

Movimientos repetitivos de flexión y extensión del tronco soportando peso, en especial en el caso de ciertas profesiones o en deportistas.

Por sobrepeso corporal.

Por atrofia de la musculatura que se encuentra junto a las vértebras de la zona lumbar.

  • Síntomas de la Hernia de Disco Cervical

Dolor cervical, especialmente en la parte posterior o lateral.
Dolor profundo, cerca o sobre las paletillas del lado afectado del hombro.
Dolor irradiado al hombro, parte superior del brazo, antebrazo y en ocasiones a la mano, los dedos o el tórax.
Empeoramiento del dolor al toser, hacer esfuerzos o reír.
Incremento del dolor al doblar el cuello o girar la cabeza hacia un lado.
Espasmo de los músculos cervicales.
Debilidad de los músculos del brazo Dolor de cuello.
Rigidez muscular o calambres en el cuello.
Dolor que se extiende hacia el brazo, que se conoce con el nombre médico de dolor irradiado o radiculopatía cervical.
Sensación de hormigueo en el brazo o la mano.
Debilidad en el brazo o en la mano.
La hernia discal puede presentar distintos tipos de síntomas. El principal suele ser el dolor. La intensidad de este dolor puede variar de moderado a intenso y producirse de manera crónica o esporádica, dependiendo del grado de deterioro del disco.
Sin embargo, no todas las hernias discales presentan síntomas dolorosos o molestos. En este caso se dice que son asintomáticas.
Si a la situación de lesión del disco le añadimos un cuadro de debilidad de los músculos de la espalda, sobrepeso, malas posturas o la falta general de tono muscular, es muy probable que los dolores sean agudos. Si estos dolores no se tratan, no desaparecerán por sí mismos.
Algunos otros síntomas que suelen acompañar al dolor son: contracturas musculares, calambres, debilidad u hormigueos en la espalda y en piernas o brazos.

  • La columna vertebral

La columna vertebral es un órgano del cuerpo humano bastante complejo.Está constituida por 33 huesos, llamados vértebras, que se encuentran puestos y articulados uno encima de otro sucesivamente, formando una sola estructura.

Las vértebras de la columna están separadas entre sí por anillos cartilaginosos, llamados discos intervertebrales (exactamente, los discos que nos interesan).

Estos discos sirven como pequeños amortiguadores que absorben las fuerzas e impactos que se producen entre vértebras, por efecto del peso del cuerpo. También juegan un papel muy importante en la capacidad de movimiento de las personas, ya que transmiten movilidad y flexibilidad a la columna.

También forman parte de la columna una serie elementos como músculos, ligamentos, tendones y vasos sanguíneos. De manera general podemos decir que los músculos son tejidos que activan los movimientos. Los ligamentos son bandas elásticas y fuertes de tejido fibroso que unen los huesos. Los tendones conectan los músculos con los huesos y los discos. Los vasos sanguíneos proveen los nutrientes necesarios para que el sistema funcione. Todas estas partes actúan simultáneamente para que puedas moverte.

Juntos, las vértebras y los discos, crean un canal de protección llamado canal medular o canal raquídeo, por el que pasa la médula espinal, que sale desde el cerebro, y los nervios espinales. Los nervios salen de la médula espinal desde el centro de las vértebras y se ramifican hacia distintas partes del cuerpo transmitiendo la información que procesa el cerebro.

Las hernias de disco ocurren en su mayoría en la zona baja de la espalda (zona lumbar) Esto es así debido a que la columna lumbar carga la mayor parte de peso del cuerpo. Cuando la hernia comprime un nervio puede provocar dolores que incluso pueden extenderse (irradiarse, en lenguaje médico) hacia otras partes del cuerpo, como glúteos, piernas y pies.

  • Tratamiento

Existen dos tipos de tratamiento, el quirúrgico y el conservador. Afortunadamente, los pacientes con hernia discal responden muy bien al tratamiento conservador a través de medicamentos, reposo y fisioterapia.

En cuanto a la fisioterapia, existen numerosos tratamientos para hernia discal, como corrientes, infrarrojos, masaje…
En el Centro Con Alma, los fisioterapeutas estamos totalmente actualizados con las últimas novedades en cuanto al tratamiento de la hernia de disco y realizamos un seguimiento post-tratamiento recomendando el Pilates terapéutico que nosotros mismos impartimos en el centro como método de potenciación de la musculatura adyacente a la hernia. Los resultados que tenemos son maravillosos ya que una mayor armonía de la musculatura de la espalda no solo alivia el dolor si no que protege ante posibles recaídas.dghsdfg